En un hecho sin precedentes en la historia del catolicismo ayer el papa Mazinger, cabeza visible de la iglesia de Roma, declaró solemnemente santo y puso en el catálogo de tales a un siervo de Dios que aun vive. Se trata nada más ni nada menos que del sacerdote Colombiano Efraín Rozo, quien según el portavoz oficial de la iglesia, “deberá ser honrado con culto a partir de mañana, aunque no haya fallecido, pues sus virtudes fueron certificadas”.
Este nuevo Santo Varón obtuvo el máximo galardón al que puede aspirar mortal alguno al entregar una muestra de fe cuyo valor es incalculable para sus colegas. En octubre de 2006 Rozo grabó en un video, sin mostrar el más mínimo arrepentimiento, la narración de sus malabares sexuales con algunos incautos seminaristas. Situación que repitió durante los más de 40 años que lleva ejerciendo el sacerdocio. El nuevo inquilino del santoral católico será conocido como San Pedófilo, o mejor San Pedo, en una clara alusión a los increíbles padecimientos que este soldado de Dios debió soportar durante su vida y obra.
Los altos mandos eclesiales continúan reunidos en Roma celebrando el acontecimiento mientras preparan la oración y los canticos con que los fieles de San Pedo deberán adorarlo. El arzobispo primado de Cali ha decretado un bacanal y campanas al vuelo durante el próximo fin de semana, para conmemorar el magno evento.
